Pocas personas he conocido a lo largo de la vida tan inteligentes, honestas, coherentes y sensibles como Paco Fernández Buey. Ha fallecido en Barcelona, el 25 de agosto de 2012, a los 69 años. Le conocí hace muchos en Palencia, su ciudad natal, con motivo de unas jornadas, algo surrealistas, sobre el significado político y cultural que podrían tener en la España franquista los acontecimientos que convulsionaron París en la primavera de 1968. Compartí frecuentes reuniones en Valladolid, donde participábamos en sesiones maratonianas que hoy recuerdo con cierta nostalgia, y casi siempre que iba a Barcelona trataba de encontrar el momento para saludarle y comentar los hechos que a ambos nos interesaban sin evocaciones excesivas al pasado pero sin abandonar lo que supusieron aquellas vivencias de la juventud.
Paco era un analista riguroso del presente y un entusiasta pensador sobre
las perspectivas del futuro, lo que conseguía mediante la fortaleza intelectual
que le proporcionaba una sólida formación en el método marxista, que había
heredado de su maestro Manuel Sacristán, a quien profesó verdadera admiración y
profundo reconocimiento. Nunca se sintió abatido, nunca aceptó que las
tragedias de nuestro tiempo debieran ser asumidas resignadamente, jamás tiró la
toalla en defensa de un mundo mejor, más solidario y más respetuoso con el
medio ambiente. Le vi por última vez en Madrid hace aproximadamente dos años,
precisamente en el acto cuyo video incluyo, como recuerdo y sentido homenaje. Aunque la salud no le acompañaba desde hacia tiempo, en ningún momento pensó que su tiempo y su compromiso podían
terminar tan pronto. No sólo nos queda su memoria indeleble sino también el testimonio y las lecciones de una obra necesaria.
Una pena que vayan desapareciendo voces muy necesarias. He visto el video y estoy completamente de acuerdo con todo lo que dice. Q.E.P.D. Besotes, M.
ResponderEliminarYa quedan pocos de esta categoría humana e intelectual. Merecido homenaje el que le brindas, Fernando.
ResponderEliminarUn abrazo