De pronto, y como era previsible, aparece la figura inconfundible de Demetrio Madrid junto al monolito que recuerda la derrota comunera y la ejecución de sus líderes en la plaza de Villalar. En numerosas convocatorias hemos coincidido en ese punto para, tras el abrazo apetecido, comentar las últimas novedades y traer a la memoria las experiencias de otro tiempo. Aunque hoy ha hecho un frío que pelaba, no ha faltado a la cita.
Demetrio Madrid fue el primer presidente de la Junta de Castilla y León, entre 1983 y 1986. Nos conocimos en Burgos, donde radicaba la sede del Gobierno Autónomo antes de su traslado a Valladolid. Desde entonces la confianza y la amistad no han hecho sino afianzarse. Cuando se encuentra con María Antonia me temo lo peor: lo zamorano, ambos lo son, se apodera del ambiente y uno se siente empequeñecido.
Julio Valdeón Baruque decía que se parecía a Fernán González. Tenía razón.
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