12 de noviembre de 2009

Borja Santos frente al riesgo



Cuando oigo criticar a la juventud adopto siempre una postura de rechazo. Tan absurdo es generalizar en sentido negativo como entender que la etapa de la vida en la que todo se contempla con perspectiva de futuro cuanto se hace es digno de aplauso y encomio, simplemente por el hecho de ser joven. Nunca ha sido "divino tesoro", como la calificó Rubén Darío, sino momento crucial de la vida, tan esperanzador como repleto de escollos e incertidumbres. En varias ocasiones he manifestado en este blog mi rechazo a la crítica situación en que se encuentra la juventud - en España y por doquier - cuando trata de enfrentarse a la precarización del empleo, al acceso a una vivienda digna o al reconocimiento de sus valores por parte de una sociedad que en no pocos casos cuestiona lo que es capaz de hacer por el dificil mundo que le ha tocado vivir.


Por eso es conveniente resaltar, entre los muchísimos casos que pudiéramos encontrar a poco que levantemos la vista, aquellos que aportan argumentos favorables al reconocimiento de los méritos y del esfuerzo realizado por los jóvenes en nuestros días. Opino así porque me viene a la mente el nombre de Borja Santos Porras, ingeniero de Telecomunicaciones, a quien he conocido personalmente hace poco, aunque de él tenía referencia a través de la blogosfera y de las crónicas que de vez en cuando escribía en El Norte de Castilla, el diario decano de la prensa española y en el que también me complace colaborar.

Entablé contactos ocasionales con él a través de la red, que dejaron de ser virtuales cuando hace unos días le saludé en Valladolid compartiendo un buen café, a la vista del Conde Ansúrez, aunque la mente y la conversación nos condujeron al sufriente mundo americano, con el que se habia familiarizado de tal modo que escucharle se convirtió en una auténtica lección al servicio del conocimiento de una realidad que, por más que se conozca y se visite, nunca se sabrá entender por completo.


Ha ejercido eficazmente como técnico de Naciones Unidas en Ecuador, uno de los paises más pobres de América Latina y más intensamente amenazados por los riesgos naturales. He ahí el sentido de la tarea realizada durante los últimos años en esta tierra de turbulencias múltiples. Analizar los factores de riesgo, valorar su importancia y recurrencia, sensibilizar a las autoridades locales y a la población susceptible de verse afectada. Ahí es nada en un mundo de privaciones, sacrificios, dureza e imágenes implacables que chocan con la mirada y que la mirada no puede evitar, porque están ahí, porque forman parte del paisaje, porque la realidad no es esconde jamás.


De esa experiencia ha salido un caudal inmenso de conocimientos, que en parte se han vertido en un libro, que recomiendo encarecidamente a cuantos sientan como propios los problemas del mundo que sólo tiene problemas. Ecuador: una mirada al riesgo. Texto y fotografias son suyos. Ambos aparecen unidos en una simbiosis perfecta. La imagen lo llena todo, en ocasiones de manera espectacular, mas la palabra la enriquece al explicarla en su demoledora versomilitud, pues nada es opaco ni matizable, nada banal ni artificioso, real como la vida misma. No sé si se podrá conseguir esta obra fácilmente. Simplemente señalaré que lo ha editado Naciones Unidas en Ecuador. No es, sin embargo, una obra comercial. Es el testimonio de una de vida de trabajo, llevado a cabo por un hombre joven lejos de la molicie, el oportunismo y la mezquindad individualista que nos invade.
En la jerarquia de valores que nuestra sociedad ha acabado imponiendo quizá no ocupe las primeras posiciones luchar contra la pobreza y contra las miserias que ocasiona el riesgo natural incontrolado. Pero lo que es evidente es que quienes asi actuan tampoco buscan grandes recompensas. Les basta con saber que han sido útiles para quien lo necesita, reconocidos en su trabajo y merecedores de ese aplauso que más pronto que tarde, esperemos, los mejores de nuestra sociedad les otorguen.

13 comentarios:

  1. ¡Que tengas buen viaje, querido Fernando! Hay muchos jóvenes MUY válidos, Borja se ve que es uno de ellos. Le has dedicado un post magnífico porque se lo merece. Habrá que leer su libro. Muchos besotes, M.

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  2. Gracias a personas como Borja podemos pensar que otro mundo quizás sea posible. Son los santos laicos de nuestra época. A ti te deseo un feliz viaje, que aprendas mucho, que disfrutes, en la medida que sea posible por allí, y que al volver nos cuentes tu experiencia. Un abrazo.

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  3. Para que luego digan que nuestros jóvenes no tienen sensibilidad. Leeré el libro, disfrutaré,reiré y lloraré, estoy segura. Disfruta de tu visita, la foto parece que sea la autopista panamericana, tan familiar para mi. Un abrazo.

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  4. Te he leído y, como siempre, tus pensamientos, reflexiones, son de una gran enseñanza para mi.
    Que disfrutes de tu viaje para que podamos disfrutar de tus comentarios.
    Un fuerte abrazo,

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  5. Cosechamos lo que sembramos, y esa es la causa de que nuestros jóvenes sean así. No se les puede culpara sólo a ellos, ni por supuesto generalizar.
    Buen post.
    Un abrazo

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  6. Tu reconocimiento es una grna recompensa al trabajo realizado y me enorgullece que te haya gustado el lib. Espero poder compartir más cafés para comentarte nuevos proyectos.
    El libro se puede encontrar en la biblioteca pública de Castilla y León en Valladolid.
    Un abrazo fuerte,
    Borja

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  7. Te deseo un feliz viaje y que vuelvas con la mente llena de recuerdos gratos. Espero tus relatos del viaje.

    Un abrazo.

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  8. Es que hay gente que sólo ven juventud en el botellón o en las gamberradas y no repara en todos esos chicos que estudian, trabajan, ayudan a los demás, luchan por un ideal, por una mejora social... Su acción pasa desapercibida porque no arman jaleo, no sacan a la policía a la calle ni molestan a esos seres que siempre están maldiciendo la juventud.
    Es una polémica en la que entran viejos y menos viejos a los que, tal vez, se les haya olvidado lo que se siente cuando uno es joven. Yo discuto esa teoría porque veo chicos y chicas que están trabajando duro por su futuro y el de su entorno y me parece abominable que se les critique tan despiadadamente.
    Este hombre es un ejemplo de lo bueno que hay en la gente joven.
    Buen viaje, Fernando

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  9. Bien, bien. Para que luego digan que los funcionarios universitarios también padecen la crisis. ¡Qué verguenza, cuate! Y la universidad de Valladolid pidiendo más dinero para estas excursiones, que sí me parecen un estupendoasunto de debate. A ver si alguien entra a la controversia, que nos podemos divertir.

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  10. Dices bien Fernando, no se puede generalizar, como se dice:
    "Hay mucho de todo en la viña del Señor"
    Esta persona lo demuestra, y muchos/as otras.
    Pienso que todo no está perdido.

    Feliz viaje y feliz vuelta.

    Un abracico.

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  11. Fernando, tomo nota porque ese mundo me apasiona ... y me encantaría despertar un día y ver que la pobreza ya no habita con ellos... pero me temo que ese sueño nunca se hará realidad.Feliz viaje.Un abrazo.

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  12. Si confiesas con tu boca que Jesucristo es tu Señor y crees en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salv@.

    Romanos 10.

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