Ha muerto Miriam Makeba, Mamá Africa. Y lo ha hecho en Italia, mientras tomaba parte activa en un concierto contra la Camorra napolitana y daba su apoyo sin reservas a la defensa de la vida de Roberto Saviano. Makeba se ha despedido sin ruido, sin avisar, utilizando sólo aquéllo que sabía hacer como pocos: su voz, capaz de transmitir mensajes y sensaciones que no admitían ambigüedad alguna. Era una de las voces más representativas de Africa y de la negritud. La misma que combatió al apartheid en su Suráfrica natal, la que le llevaría a asumir la lucha contra el racismo en Estados Unidos, que sufrió en su piel y en sus relaciones personales, la que le situó en la vanguardia de los movimientos de liberación que en los años sesenta dieron forma y futuro a los nuevos países del África que se desprendía de su pasado colonial.
Ha muerto Makeba, otra de las luces que se desvanecen en Africa.
Y es que.....
Miradas que no engañan
Las luces en Africa comienzan a apagarse,
sumidas en la nostalgia que en otro tiempo
las hizo vigilantes, alertas, siempre vivas,
luces resistentes al olvido y a la indiferencia,
luces de rebeldía y de pasión por el futuro.
No quieren terminar, porque el dia que lo hagan
quedarán oscurecidas, silentes, para siempre.
Muchas desaparecieron y su recuerdo es desvaido.
Nkrumah, Lumumba, Touré, Senghor,
Machel, Ben Bella, Nasser, Modibo Keita.
Nadie destaca ya en una tierra explotada,
ferozmente empobrecida, dejada a su suerte.
Corrupción, abandono, codicia, dolor.
La luz de Mandela sobrevive, solitaria, aunque rotunda.
Luz surafricana proyectada hacia el mundo, que la necesita.
La misma luz ya extinta que nos lega la voz infatigable de Makeba.
Mamá Africa la llamaban.
Las luces en Africa comienzan a apagarse,
sumidas en la nostalgia que en otro tiempo
las hizo vigilantes, alertas, siempre vivas,
luces resistentes al olvido y a la indiferencia,
luces de rebeldía y de pasión por el futuro.
No quieren terminar, porque el dia que lo hagan
quedarán oscurecidas, silentes, para siempre.
Muchas desaparecieron y su recuerdo es desvaido.
Nkrumah, Lumumba, Touré, Senghor,
Machel, Ben Bella, Nasser, Modibo Keita.
Nadie destaca ya en una tierra explotada,
ferozmente empobrecida, dejada a su suerte.
Corrupción, abandono, codicia, dolor.
La luz de Mandela sobrevive, solitaria, aunque rotunda.
Luz surafricana proyectada hacia el mundo, que la necesita.
La misma luz ya extinta que nos lega la voz infatigable de Makeba.
Mamá Africa la llamaban.
He ahí la canción que la proyectó al mundo
http://www.redescristianas.net/2008/11/07/guerra-en-el-congo-%E2%80%9Clas-guerras-en-la-republica-democratica-del-congo-se-deben-a-las-riquezas-que-las-transnacionales-se-quieren-llevar%E2%80%9D/
ResponderEliminarPongo eso, Fernando, con tu permiso, porque es de justicia reivindicar lo que recuerdas: Que África existe, para nuestro provecho, y a su pesar.
Pero todavía quedan jugladores de su propia realidad.
Buenos días, amigo.
Ha muerto una luchadora y nunca mejor dicho con las botas puestas.
ResponderEliminarComo vivió, cantando y defendiendo África con su hermosa voz. No hay que perder la esperanza. Decía Ernesto en su blog "Testido" una frase de un artista gráfico: "Renunciar a la esperanza es un suicidio espiritual", y yo he adoptado esa frase como un lema. Vendrán otras Miriam Makeba. Esto no puede quedar así.
ResponderEliminarMira que la gente habla de África y los que manejan el cotarro parecen no darse cuenta de ella salvo cuando quieren limpiar sus conciencias.
ResponderEliminarUna gran mujer y una gran voz.
Saludos y salud
Los referentes van desapareciendo y ciertamente, nadie parece tomar el relevo, al menos no con la misma fuerza, compromiso y empuje que todos los nombre que enumeras en tu post.
ResponderEliminarDesgraciadamente, áfrica se consume lentamente en su propia miseria sin que nadie asuma de verdad, el reto de arrancarla de la dinámica que ha marcado su historia inmediata.
Una gran mujer y una gran voz.
ResponderEliminarY como dice M. Eugénia Creus-Piqué, esta luchadora ha muerto con las botas puestas.
Besos
HOLA!MUY BUEN POST...QUE MUJER!QUE VOZ!...
ResponderEliminarUNA VIDA DEDICADA A LUCHAR ´POR LA LIBERTAD Y LA IGUALDAD... AFRICA DEBE SEGUIR VIVA Y LUCHANDO EN SU MEMORIA...
GRACIAS POR COMPARTIR...
BESOS.
SILVIA CLOUD
Hay mucha gente en Africa que desearia gritar, pero es mucha mas la que vigila para hacerles callar.
ResponderEliminarsiempre es una pena que se vaya alguién...más una luchadora con esa fuerza. Precioso homenaje, amigo Fernando.
ResponderEliminarBesos
Es verdad, una luchadora de las que ya no quedan...el lunes creo que leí la noticia y realmente sentí algo así como...ha muerto en paz con el triunfo de Obama y haciendo lo que la hizo también triunfadora, cantando, pasará a la historia esta gran mujer, vaya que si.
ResponderEliminarGran homenaje, una abrazo.
didi.
Precioso tu texto y el poema. Escuché y vi a Miriam Makeba en Canada en los sesenta. Era guapísima con una presencia y prestancia sumamente elegante y con una voz prodigiosa; con esos giros clickeantes tan difíciles de conseguir por nosotros pobres blancos que queríamos imitarla... Besotes, M.
ResponderEliminarToda persona de sangre africana cree en la fuerza de "sus ancestros". Se llaman "brother/sister y cuentan ciertamente con el respaldo de esa unión. Quizás Obama cuente con esa Diosa de Ebano, quizás haya un cielo donde se cante Gospel para proteger a los que como él, quieren cambiar el mundo.
ResponderEliminarFernando, ¡qué buenos recuerdos me trae esta canción!
ResponderEliminarQue la tierra le sea leve a esta gran señora.
Un abrazo
Uso su voz para hacer llegar al mundo entero la verdad de Africa, que su labor no caiga en saco roto ahora que ella ya no esta entre nosotros.
ResponderEliminarAfortunadamente es una de estas personas que quedarán en la memoria de la gente, dobre todo de Africa, continente que tiene que se apasionante.
ResponderEliminarBuenísimo tu post Fernando, es increible que un continente entero, esté pisoteado por el resto del mundo. Africa negra se muere de hambre, y el mundo mira para otro lado. La canción de Mirian Makeba dió la vuelta al mundo, no sabía que hubiera muerto. Un beso Fernando
ResponderEliminarUna canción, unas palabras, un "aguantar", van calando. Cuesta, es como una carrera de fondo.
ResponderEliminarNo importa el tiempo.
¡El tiempo ha llegado!.
Gracias por el video de Mirian Makeba.
Un besico. Gracias por visitarme.