Carlos Berzosa Alonso-Martínez es un economista prestigioso, que ha realizado a lo largo de su vida profesional interesantísimas aportaciones sobre la Economía internacional, entre ellas un excelente estudio sobre el subdesarrollo en colaboración con ese ejemplo de honestidad personal e intelectual que es José Luis Sampedro, maestro de lo mejorcito de la economía internacional investigada en España, novelista de éxito y provecto personaje que suscita tanta admiración como reconocimiento.
Berzosa consiguió, al fin, tras un segundo intento, ser elegido Rector de la Universidad Complutense de Madrid, la de mayor tamaño en profesores, alumnos y presupuesto de España, poniendo término a una etapa sombría de la Complutense que bajo el mandato del inepto Gustavo Villapalos y quien le sucedió se caracterizó por la mala gestión, el sectarismo y la mediocridad. No es, desde luego, una Universidad cómoda pero no cabe duda que Berzosa ha hecho ingentes esfuerzos por recuperar su prestigio, acreditarla en el mundo, sanearla financieramente y desarrollar en ella un ambiente de diálogo, de comunicación y de transparencia que resulta admirable o, por lo menos, digno de consideración.
La grave afrenta sufrida el dia 24 de Marzo de 2010 no puede ser minimizada.
¿Qué ha pasado para que a un hombre así se le insulte, se le zarandee, se le escupa en uno de los actos de vandalismo universitario más lamentables de cuantos han sucedido en España en los últimos años? ¿qué reflexiones, qué argumentos pueden aflorar en la mente de unos jóvenes aparentemente bien formados, pretendidamente cultos, en su mayoría quizá inteligentes para que de pronto se lancen en tromba, como una feroz marabunta contra el Rector elegido, un hombre ya sexagenario, y le humillen hasta el extremo de tener que refugiarse como si de un delincuente se tratara?
Jamás podrá haber excusas para que ese tipo de salvajadas sucedan. Parece ser que el motivo es el intento de evitar la segregación por sexos en los Colegios Mayores de la Complutense , haciéndolos mixtos, sintonizando así con una tendencia mayoritaria en ese tipo de Centros y que además responde al cumplimiento de los principios de igualdad de género tan preconizados en nuestra sociedad y en las leyes. Más allá de la relevancia mayor o menor de la causa, el mero hecho de que ocurra una cosa así pone en evidencia que algo grave está ocurriendo en la realidad social y cultural española.
Me resisto a hacer diagnósticos o a presumir motivaciones que sólo un riguroso análisis sociológico podría desentrañar. Pero la simple percepción de que este tipo de agresiones puedan suceder en un entorno donde existen numerosos espacios para el diálogo, el debate, la confrontación de ideas y la búsqueda de consensos lleva a la conclusión de que algo se está haciendo mal para que, ante la simple presencia de la persona que representa una idea o defiende una postura sin agredir a nadie (y no me refiero solo a Berzosa sino a los políticos que, invitados a intervenir en la Universidad, son abucheados hasta impedirles hablar ), el ambiente donde debiera prevalecer el respeto a la diferencia se convierta en una turbamulta enfurecida, que sólo sabe del insulto, la amenaza o la embestida más miserable.
Por lo que yo he visto en la tele, hay un trasfondo más serio que la creación de Colegios Mayores Mixtos, al parecer algunos los colegios sufren deficiencias bastante graves (goteras, grietas, caídas de techos) lo que me parece bastante más importante que el que un colegio mayor sea mixto o no. En cualquier caso, ya salió ayer un representante estudiantil, desligándose de lo sucedido y pidiendo disculpas. Es más de lo que hacen muchos supuestos adultos (políticos, profesores, fiscales, jueces...) cuando meten la pata.
ResponderEliminarNo me parece tampoco buena cosa, andar demonizando a los estudiantes, y eso, aunque yo no comulgue con algunas de sus actitudes.
Gracias, Anabel, por tu comentario. No demonizo a los estudiantes, pues los hay admirables y respetuosos. Conozco bien al alumnado universitario. También es verdad que se protesta contra las deficiencias de los Colegios Mayores, cuestión que data de antiguo y que sorprende no se haya resuelto con la rapidez que debiera. En cualquier caso, las inversiones en Colegios Mayores figuran en los presupuestos anuales de las Universidades, que se aprueban en Consejo de Gobierno, donde están los representantes estudiantiles además de una representación de los directores de los CCMM, que ignoro si han presionado lo suficiente en esa dirección. En cualquier caso, y esa es la razón de mipost, nunca se podrá justificar lo que se le hizo ayer a Berzosa o a Rosa Diez en la Universidad de Barcelona. Un abrazo
ResponderEliminarNingún tipo de agresión a personas - se comulgue o no con sus ideas - está justificado. Personalmente, siempre he manifestado rechazo por esos universitarios que boicotean intervenciones de personalidades invitadas, pero me da mucha pena que la inmensa mayoría de los asistentes permanezca en silencio.
ResponderEliminarLo mismo pensaría si el rector agraviado hubiese sido Gustavo Villapalos, al que le tengo una consideración muy similar a la tuya...
Un abrazo
Querido Fernando: comparto tu texto de principio a fin. Cuando vi las imágenes me quedé muy impresionado por la violencia que se respiraba.
ResponderEliminarEspero que las sanciones sean justamente proporcionales a los actos cometidos.
Es una vergüenza. Y decirlo no es "demonizar a los estudiantes" sino afirmar ante quienes se comportan cono ese salvajismo, que en la democracia no cabe insultar, zarandear y escupir a nadie. Ya está bien.
Abrazos,
Diego
No voy a repetir lo que ya han dicho los demás "comentaristas", con los que estoy de acuerdo. Ni voy a añadir nada, porque hechos así me dejan, literalmente, bloqueado. Tengo que darme un tiempo para reaccionar. Tu artículo, perfecto, Fernando. Gracias por haberlo escrito.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo, querido Fernando. Me escandalizó la virulencia del ataque al rector además por una cuestión, en el fondo, bastante nimia. Esperemos que no vuelva a ocurrir. Besotes, M.
ResponderEliminarEn primer lugar mi solidaridad con el Rector de la UCM y los trabajadores que fueron agredidos fisica y verbalmente el pasado día 23. Espero que el Rector active los mecanismos necesarios para proteger al resto de la comunidad universitara de estos pequeños residuos de intolerancia que todavia campan por los Colegios Mayores. El simple hecho de que Esperanza Aguirre, la gran defensora de lo público..., defienda a los violentos residentes de los Colegios Mayores... ¿porque será?... ¿pago de servicios a ciertas asociaciones de antiguos colegiales?... será por lo que en su día publicó el diario el pais: El escolta de Tamayo y Sáez, tránsfugas del PSOE, cobró dinero de los colegios mayores...
ResponderEliminarhttp://www.elpais.com/articulo/espana/Universidad/Complutense/creo/caja/b/pagar/trabajos/irregulares/elpporesp/20060427elpepinac_6/Tes
No sé nada del tema, y prefiero no opinar sobre él, pero el insulto es la terjeta de presentación del que no tiene argumentos convincentes y se autodesacredita el mismo que lo usa.
ResponderEliminarEsa es por desgracia,la educación que encontramos hoy en muchos de nuestros jóvenes,
¿Sabes que estudié en la Complutense? Y recuerdo aquella etapa con sabor agridulce...
Besos
Estimado Fernando Manero
ResponderEliminarHa sido durante largos meses un placer leerte.
Y
En esta semana donde se acunan tantos sentires, deseo la disfrutes de acuerdo a tus intimas creencias.
Nos veremos el domingo de Pascuas!!!
Cariños
¿no será simplemente un nuevo episodio de la falta de respeto a los mayores y a las instituciones?
ResponderEliminarPor desgracia, un rector no es NADIE para unos niños bien que viven de puta madre a costa de sus papás.
En la UJI (Universitat Jaume I) de Castellón, hace poco ocurrió algo parecido. Las universidades siempre (y cada vez más) han sido un nido de ideologías. Pero de ideología extremas. Esto es lo que me da rabia. Por lo que respecta a la de Castellón, la facción mayoritaria es la izquierda (no tengo nada en contra de esta postura) pero allí nunca es bien recibido alguien de derechas. Los estudiantes libérrimos y defensores de la libertad son quienes paradógicamente, coartan la libertad de expresión a los conferenciantes de distinto modo de pensar qu ellos.
ResponderEliminarNo es pues, un buen ejemplo de convivencia pacífica esto, sino todo lo contrario. Parece ser que la inteligencia no es sinónimo de tolerancia.
Un abrazo.
Buenos días:
ResponderEliminarEs un tema serio y como madrileña me averguenzo.
Se deben tomar las medidas que hay que tomar hacia ese grupo. No medir a todos con el mismo rasero.
Saludos
Marcho unos dias fuera amigo, vuelvo a finales de semana.
ResponderEliminarUn abrazo...!
He léido con atención tu texto, me ha parecido muy cabal.
ResponderEliminar¡Algo falla!
Gracias por abrirnos los ojos, por darnos a conocer estos detalles tan importantes.
Un besico lleno de cariño.
¡Qué pena Fernando!, que quien ofende , tendría que aprender lo primero a respetar, a dejarse oír utilizando argumentos y cauces legítimos- para eso está la Universidad-, pero hasta los universitarios están copiando los modelos sociales que prevalecen cual epidemia gripal televisiva.
ResponderEliminarMe gusta mucho leer tus entradas, desgraciadamente -por falta de tiempo-no siempre puedo dar mi opinión, pero hoy si lo hago y estoy plenamente de acuerdo contigo.
Abrazos.
No todos los universitarios copiamos esos modelos sociales de la telebasura señores.
ResponderEliminarAlgunos como los de complutense Aranjuez, nos estamos asociando y dando a conocer nuestra situación en los medios. No hemos montado ningún escándalo semejante, aunque realmente, ¿quien falta al respeto antes?
El usar buenas palabras y estar dentro del protocolo ya lo conocemos, todos los políticos lo hacen y no resta para que muchos roben lo que es de todos, que duele más que ver a Belen Esteban y demás jauría en la televisión, es MUCHO PEOR.
Y nuestra situación es un reflejo político duro y maduro.
¿Saben que por no tener no tenemos ni papel en el baño? Por no hablar de horarios incongruentes en los que se montan clases en un mismo aula, un frío insoportable, una atención de secretaría pésima, personal de limpieza que se tira dos meses sin cobrar, profesores que imparten tutoría del antiguo plan sin cobrarlas, negación de derechos como la modificación de matrícula o anulación de créditos (este año para recaudar más) y un largo etcétera que para saberlo solamente tienen que preguntarle a algún estudiante con dos dedos de frente, el clima es insoportable, todo el mundo enfadado y triste.
Si esto es llevar bien una universidad, que baje Apolo, Dios, o quien sea y que lo vea.
Porque con todo mi humilde respeto, pero con un gesto de macarra ilustrado les digo: No tenemos ni papel con que limpiarnos el culo, ni jabón para solucionarlo.
Así que o se hace una limpieza de la cadena por arriba, hasta llegar a la del váter, o mal vamos.